LOS
DERECHOS HUMANOS COMO FRENO A LA MINERÍA Y SU ACUMULACIÓN CAPITALISTA
MARIO ALBERTO FAJARDO
CAMARGO
ESPECIALIZACIÓN EN
PEDAGOGÍA DE LOS DERECHOS HUMANOS
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA
Y TECNOLÓGICA DE COLOMBIA
DUITAMA-BOYACÁ
RESUMEN:
Nicaragua
país centroamericano que afrontó el régimen dictatorial que iniciara en 1934
con Anastasio Somoza padre y que terminara en 1979 con el triunfo del Frente
Sandinista de Liberación Nacional –FSLN- herederos del antimperialismo del
general Cesar Sandino, sin embargo a pesar del triunfo de la insurgencia mediante
elecciones celebradas en 1990 retorna la derecha al poder en cabeza Violeta
Chamoro, quien adelantó políticas de extracción minera, lo que abrió las
puertas a la inversión extranjera en cabeza de las multinacionales Canadienses,
que son los que en la actualidad poseen la mayor parte de las concesiones que
se han otorgado, así mismo con el retorno de los sandinistas al poder en 2006
tal situación no ha cambiado, por lo que tal política de acumulación
capitalista sigue rondando los campos de Nicaragua dejando desolación y pobreza
a su paso.
PALABRAS
CLAVES:
Nicaragua,
Derechos Humanos, Minería, Capitalismo, Medio Ambiente, Democracia,
Movilización social.
ABSTRACT
Nicaragua Central
American country that faced the dictatorial regime that began in 1934 with
Anastasio Somoza father and ended in 1979 with the triumph of the Sandinista
National Liberation Front -FSLN- heirs of Cesar Sandino general
anti-imperialism, however despite the victory of the insurgency by elections in
1990 returned the right to power at the head Violeta Chamoro, who announced
policies mining, which opened the doors to foreign investment at the head of
the Canadian multinationals are those who currently own most of the concessions
that have been granted, likewise with the return of the Sandinistas to power in
2006 this situation has not changed, so that such a policy of capitalist
accumulation continues to haunt the fields of Nicaragua leaving desolation and
poverty in their wake.
KEYWORDS:
Nicaragua, Human Rights, Mining, Capitalism, the
Environment, Democracy, Social Mobilization.
INTRODUCCIÓN
La historia la escriben los
pueblos –así lo afirmo S. Allende- muestra de ello es el pueblo nicaragüense
que ha visto el cambio de régimen político en tanto el Frente Sandinista logró
su triunfo sobre el régimen dictatorial Somicista en 1979, así mismo lo ha
hecho los habitantes del municipio de Rancho Grande que mediante la
movilización le hicieron frente al avance de la explotación minera que fuere a
desarrollar de manera concesionada la multinacional canadiense B2GOLD, lo que
demostró y marcó un hito frente a los alcances de la movilización y
organización popular.
Sin embargo la minería no es
un flagelo que vivía únicamente el pueblo de Rancho Grande, pues en la
actualidad se ha concesionado alrededor del 11%[1] del territorio
nicaragüense, por lo que la minería se abre paso devastando el verde de los
campos dejando un gris oscuro plagado de hambre y miseria, pues mediante
dadivas llega y se mantiene pero al marcharse deja los efectos de la
acumulación capitalista que desangra el mundo y vidas en cada paso que da.
Así mismo la minería además
de dejar los rastros de su egoísmo en el medio ambiente, también deja sus
marcas en el escenario político en tanto puede llegar a reconfigurar la
correlación de fuerzas de un país, pues con la inyección de capital a campañas
electorales favorecen sus intereses, por lo que ello deriva en una
inestabilidad económica pues obtienen prebendas que les permite acumular y
apropiarse en casi la totalidad de las ganancias producto de sus actividades de
extracción y explotación, dicha circunstancia afecta la composición social de
la comunidad, principalmente la que se encuentra en el lugar de explotación
minera, pues se generan algunos empleos directos y otros indirectos que
permiten en cierta medida solventar necesidades de manera parcial y por ultimo
afecta el medio ambiente en tanto los desastres y las contaminaciones están a
merced del afán de explotar y extraer ganancias del subsuelo.
Entonces el presente ensayo
abordara en primera medida el contexto socio-politico en el cual se encuentra
Nicaragua, por consiguiente se abordara lo relacionado a la explotación minera
en el cual se determinará las principales explotaciones mineras en Nicaragua y
sus afectaciones, por consiguiente se desarrollara la movilización social como
freno a los avances mineros como expresión popular de la soberanía y por último
se enunciaran unas conclusiones que nos evidencien la importancia de los
Derechos Humanos como banderas que encabezaran las movilizaciones que hagan
frente al egoísmo de la explotación minera.
CONTEXTO
SOCIO-POLÍTICO NICARAGÜENSE
El contexto nicaragüense se
enmarca en el tránsito de un régimen dictatorial de Somoza a un régimen
político democrático que deriva del triunfo del frente sandinista para la
liberación nacional en el año de 1979 y que durare hasta el año de 1990 en el
cual mediante elecciones retorna la derecha al poder, sin embargo mientras los
sandinistas estuvieron en el poder mejoraron el sistema de salud, así mismo se
“generaron grandes inversiones en materia
educativa que logró erradicar el analfabetimos en muchas regiones” [2].
Así las cosas y en el marco
de la intervención norteamericana en busca de la desestabilización del
sandinismo, para la época de los años 80 emerge el grupo paramilitar “los contra” que agudiza la violencia y
desestabiliza el gobierno sandinista, permitiendo el retorno de las políticas
liberales que defendiese en ese entonces los Estados Unidos[3], situación que no es
propia únicamente del gobierno y pueblo nicaragüense, pues toda Latinoamérica
ha soportado con la venia de las elites latinas para que desde fuera se fijen
los parámetros por los cuales se deben sustentar las políticas económicas y
políticas, así mismo las sociales.
Entonces para que los
sandinistas en cabeza de Daniel Ortega retornaran al poder, se desarrolló un
viraje político del Frente en tanto asumió alianzas políticas con sectores
conservadores, lo que lo llevó incluso a generar oposición a la ley de la
despenalización del aborto[4], es decir que las
políticas variaron, incluso a tal punto que se han otorgado numerosas
concesiones mineras a empresas multinacionales con el fin de generar inversión
extranjera y poder salir del hueco fiscal que atraviesa el país, “sin embargo, la derrota electoral de los
Sandinistas en 1990, implicó que el pueblo nicaragüense tuviera que soportar
tres gobiernos de derecha (algunos con descarados componentes de corrupción
como el periodo de Arnoldo Alemán) que comenzaron a implementar las políticas
neoliberales en boga por esos días en la región, buscando además desterrar los
logros alcanzados por la revolución”[5].
Nicaragua afronta una
crisis económica que ha derivado en
problemas estructurales, a tal punto que “Nicaragua es el segundo país más
pobre de américa latina”[6] , por ello las cifras que
develan la problemática social llega al “65,9% de la población vive por debajo del
umbral de pobreza, si bien en el ámbito rural esta cifra aumenta hasta el 89%
ddel cual, el 53% se encuentra en condiciones de extrema pobreza. En cuanto a
la distribución del ingreso, el 20% de la población acapara el 63,6% del
ingreso nacional”, lo que genera mayores esfuerzos para superar las cifras
producto del sistema polico-económica.
Encontrando de manera errada
en la minería la posibilidad de solventar la crisis, sin embargo tales medidas
son paños de agua tibia que no solucionan de fondo lo que sufren los
nicaragüenses, por lo que la movilización social se fortalece en pro de las
garantías de los derechos humanos y en contra del modelo extractivista
sustentado en la acumulación por desposesión, que no permite hablar a los
directamente afectados, a los campesinos e indígenas pobladores rurales que ven
como los desplazan de la movilización social y popular con dadivas que les
permite solventar sus necesidades de manera parcial y esporádica sin que ello
lleve en el tiempo una solución efectiva.
MINERIA
EN NICARAGUA, LA MUERTE DEAMBULANDO A MERCED
Nicaragua al igual que el
resto de países latinoamericanos padece una legislación excesiva en materia de
minería, es decir que los constantes cambios que deben aplicarse para que las
empresas multinacionales vean con agrado la inversión obliga a una variación en
todos los escenarios, pasando por el económico incluso llegando al social, es
decir que se prepara y abona el terreno para que florezcan las grandes y
excesivas ganancias para los extranjeros, en tanto el pueblo sigue afrontando
las precarias condiciones.
Por tanto en Nicaragua existe
la Ley 316, 331, 387, 475, 525, 730, así
mismo como los Decretos 119-2001, 92-2002, 18-2011, 188-2009[7],
leyes en las cuales se menciona la participación de la ciudadanía en la toma de
las decisiones en cuanto a la explotación de recursos mineros, es decir que
dicha figura podría asimilarse con la que en Colombia se denomina “consulta previa”, tal vez y con los
mismos alcances, es decir que es meramente consultiva pero no vinculante para
la concesión que se busca, es decir que se viola el derecho a la libre
determinación de los pueblos.
Adicional a ellos debe
tenerse de presente el proceso que se ha establecido para la decisión en cuanto
a la concesión que se buscaría otorgar, así las cosas se tiene que el proceso
es a corto plazo, es decir que no se exige un desgaste administrativo
significativo, por lo que las multinacionales se les ha facilitado el camino en
torno a los protocolos y requisitos que deben seguir y cumplir para que les sea
otorgada la concesión, así se tiene[8]:
Entonces se tiene que el
proceso para otorgar una licencia de explotación minera es decir un concesión a
la empresa multinacional puede tardar alrededor de 120 días, es decir alrededor
de 4 meses para que se realice el proceso de inspección y análisis sobre la
viabilidad del proyecto minero, así las cosas se tiene que no se analiza de
fondo las implicaciones que ello puede tener para el contexto socio-político
que rodea a Nicaragua, por ello no existe de fondo un estudio serio frente a lo
derivado, sino que se involucra en una carrera contrareloj por otorgar
territorios para que sean explotados y con posterioridad explotados.
Al
ser tan sencillo el proceso para la concesión de explotación minera, se tiene
que “(…) la mayoría de las concesiones se
encuentran en los distritos mineros ya
conocidos, que se encuentran en la Región Autónoma Norte (RAAN) como
Rosita, Siuna y Bonanza, sin embargo
también hay una fuerte concentración de concesiones en zonas como la Libertad,
Juigalpa, Santo Domingo en Chontales, en el municipio de Villa nueva en León y
en Nueva Segovia que lamentablemente todo el departamento se encuentra
concesionado casi en su totalidad”[9],
lo
que determina que las cadenas de pobreza del país concentra también la mayor
cantidad de concesiones mineras en Nicaragua.
“Actualmente el territorio concesionado
para proyectos mineros en Nicaragua corresponde a alrededor del 11% del
territorio nacional”[10], lo
que respalda la conclusión de la facilidad con la que pueden acceder las
multinacionales mineras, a la concesión de territorios con el fin de que sean
explotados, adicional al precio del oro en el marcado que también marca la
tendencia en torno al creciente número de solicitudes para que sean otorgadas
licencias, así se tiene que “(…) los
ingresos por las exportaciones de oro en bruto en el año 2012 alcanzaron los
US$431.9 millones, cantidad superior en 18.6% a los obtenidos en el 2011,
cuando aportaron US$364.1 millones”[11].
“La
empresa B2Gold ya cuenta con otros proyectos en Nicaragua en las localidades de
Santo Domingo Chontales y la Comunidad Santa Pancha en Larreynaga León, en
donde en el año 2012 lograron batir records de producción generando aproximadamente
157.885 onzas de oro”[12].Generar
respaldo en los pobladores es producto de pequeñas dadivas o asistencialismos a
los pobladores de los territorios donde se desarrollaran los proyectos mineros,
pervirtiendo la participación popular en tanto esta se ve viciada por las
necesidad que padecen.
En las últimas dos décadas se
ha presentado en la industria minera una gran relevancia, debido a la
disminución de regulaciones para su actividad por parte de los gobiernos
entreguistas latinoamericanos, así mismo por la creciente demanda de metales y
sus altos precios en el mercado[13], así mismo como la gran
demanda de hierro por parte de la China en su producción de acero[14], entonces la pregunta que
surge en tal contexto de auge de explotación minera es ¿Quién está aprovechando
tal situación de regulación tibia y auge en el mercado de los metales?, por lo
que se tiene que “(…)entre el 50% y el
70% de la actividad minera en América Latina está a cargo de empresas
canadienses”[15].
En ese sentido se han tejido
varios mitos entorno a la minería y su desarrollo, teniéndose “un primer mito es que la explotación minera
genera bienestar y desarrollo (…)”[16], por lo que las
contribuciones en primera medida se encaminan a comprar un consentimiento de
los pobladores para que éstos no ejerzan resistencia alguna al proyecto, así
pues “la contribución de la actividad
minera a la economía nacional de los países centroamericanos sigue siendo
marginal, oscilando entre el 1.25% del PIB en Honduras y el 2.5% en Nicaragua. Si
comparamos estos datos con la actividad agrícola, que en Honduras representa
casi el 40% del PIB, es evidente que estamos ante una política errada que está
destinada al fracaso"[17].
Otro de los mitos que se han
tejido en torno al desarrollo de la industria mineras “(…) es la generación masiva de empleo, estudios realizados por el CEHPRODEC
demuestran que las empresas mineras medianas, como las que operan en
Centroamérica, generan, en su período de mayor explotación, 250-300 empleos
directos y unos 1,200 indirectos”[18], por lo que tales cifras
distan de conceder una estabilidad laboral para los pobladores de la regiones
mineras, es decir que con suerte se puede accederé a un empleo directo y que
por tanto con mayor frecuencia lo que encontraras será la contratación indirecta,
ello sin mencionar las políticas laborales que cada día toman mayor tendencia a
la desprotección del trabajador en busca de la protección de la inversión
representada en los patronos multinacionales.
Otro de los mitos que se han
gestado en torno a la minería es su desarrollo amigable con el ambiente sin
embargo, ello queda en tela de juicio al determinarse que “las empresas mineras necesitan de mucha agua para realizar sus
labores, de acuerdo con la publicación del Centro Humboldt "La minería o
el poder del dinero", estas empresas gastan en un día el agua que una
familia campesina consumiría en veinte años[19],
por lo que queda desvirtuado el escenario amigable de la minería con el
ambiente en tanto desarrollo consciente del medio ambiente, pues no puede ser así,
en tanto el desarrollo de la minería implica la destrucción de la corteza
terrestre y el desarrollo de procesos
químicos para el desprendimiento de los metales, llegando así a utilización
excesiva de recursos que no pueden ser equiparados con la mercancía dinero,
pues éstos no pueden ser comercializados.
Así pues, se tiene que la
minería ha generado grandes violaciones de derechos humanos a lo largo de su
historia en américa latina, pues ha generado desplazamientos producto de las
oposiciones que han desarrollado los pobladores de las zonas en las que se
desarrolla o se busca desarrollar la actividad minera, se ha violado el derecho
a la vida, pues existe asocio criminal entre las multinacionales mineras y los
grupos paramilitares, ello con el ánimo de silenciar a los que han decidido
levantar su voz como protesta ante los vejámenes y atropellos de la minería
contra el medio ambiente y el medio social.
Es decir que la minería está
rodeada de absurdos y problemáticas que desencadenan una violación masiva de
derechos humanos y además con la complacencia de los gobiernos entreguistas,
que permiten que las políticas de gobierno le sean fijadas por externos que no
se duelen de la situación que se atraviesa en el país, pues su único objetivo
se enmarca en la posibilidad de acumular capital en el marco de la pobreza que
rodea las minas.
RANCHO
GRANDE, EJEMPLO DE DIGNIDAD.
Rancho Grande es ejemplo de
dignidad y resistencia frente al avance despiadado de la minería, éste es un
pequeño municipio donde viven aproximadamente 35.000 habitantes, cuya principal
fuente de sustento es la agricultura (cacao, café y granos básicos como el
frijol) y donde se pretende instalar el proyecto El Pavón para la extracción de
oro por parte de la empresa canadiense B2Gold (una empresa canadiense
explotando oro en América Latina)[20].
Muestra de ello es el “ (…)25 de abril pasado, más de 3.000
personas marcharon en el municipio de Rancho Grande, Matagalpa (norte de
Nicaragua) para gritarle, una vez más, un NO rotundo a las pretensiones de
explotación de la empresa transnacional minera canadiense B2Gold”[21], demostrando no solo el
absurdo del sustento de la economía bajo los daños ambientales que tendrán que
padecer eternamente los habitantes del municipio, por lo que ellos y ellas “
(…)denunciaron las grandes mentiras sobre
el supuesto desarrollo y beneficios de la explotación minera. La marcha demandó
al gobierno central una verdadera reforma agraria, otorgando tierras a los
campesinos para la producción agrícola y ganadera, y contribuir a una verdadera
soberanía alimentaria. Igualmente se exigió que suspenda los permisos y las
concesiones de exploraciones y explotaciones mineras ya otorgadas”[22].
Por lo que el contexto de la movilización no fue contestataria sino que fue
propositiva en tanto los pobladores entienden sus dificultades y avanzan en
propuestas de fondo que solventen los problemas estructurales que los aquejan.
Predicar el éxito de la
movilización social que frenó el avance de la minería, se debe tener en cuenta
la multiplicidad de sectores allí participes, que no solo se vincularon sino
que fueron bastiones en la convocatoria, por lo que la marcha fue convocada por
“(…)el movimiento local Guardianes de
Yaoska, en torno al cual la población del municipio se ha organizado
mayoritariamente para resistir las pretensiones de la transnacional canadiense.
La población organizada cuenta con el total apoyo y respaldo del Grupo
estratégico contra la minería de Matagalpa, un espacio de coordinación de
varios movimientos y organizaciones sociales (ecologistas, feministas,
comunales, defensoras de DDHH, de desarrollo...), iglesias (evangélicas y
católica) y otras expresiones populares del departamento de Matagalpa y algunas
de nivel nacional”[23].
La marcha contó incluso con
el apoyo de la administración local que ve como el proyecto minero concesionado
por el Gobierno Central puede encaminarse a la destrucción del medio ambiente
en rancho grande, generando graves afectaciones para el conjunto de nicaragüenses,
en tanto “(…) contamina y seca las
fuentes de agua, hace desaparecer montañas y bosques, afecta gravemente los
cultivos y la biodiversidad y aumenta las enfermedades de las poblaciones
aledañas"[24], es decir que existe una
multiplicidad de daños que a pesar de ser contemplados por los gobiernos
latinoamericanos, dan vía libre para la explotación minera.
Por tanto en medio de la
manifestación “(…) se hizo un llamado a
la población para que no se deje engañar con regalías mal intencionadas por parte
de la empresa, y para que continúe unida, organizada y firme en contra de la
minería, como un compromiso para la conservación y protección de los recursos y
vidas de las comunidades, es decir hacerle frente a las políticas de
clientelismo y asistencialismo que desarrollan las empresas mineras en el marco
de buscar el respaldo popular en el proyecto, sin evidenciar los daños que
causaran y seguirán causando incluso una vez se deje de explotar el mineral.
Entonces se tiene que “la Constitución señala que Nicaragua es una
República democrática, participativa y representativa cuya soberanía reside en
el pueblo por lo que el gobierno nacional, regional y local debe someterse a la
voluntad popular, en el caso concreto el CENIDH constató que una amplia mayoría
de la población de Rancho Grande se opone a este proyecto”[25],
es decir que la voluntad popular y mayoritaria expresada en la marcha en
contra del proyecto minero en Rancho Grande es vincúlate para el gobierno, lo
que se tendría que entender como un NO rotundo y por ello el freno inmediato
del proceso de exploración y explotación minera.
CONCLUSIONES
La minería a lo largo del
territorio latinoamericano se ha venido abriendo paso con el falso lema de
progreso, pues como se ha venido advirtiendo a lo largo del presente escrito no
es posible que la minería sea el bastión o la punta de lanza que llegue consigo
el desarrollo de la región, pues está demostrado que no es posible que se
predique la generación de empleo y mucho menos que ayude en el crecimiento de
la economía del país que permite sea explotado.
Así entonces se tiene que el
freno a tal locomotora como es llamada en Colombia, pero en otros países se
observa como la fuente de riqueza, provenga de la organización y movilización
social de los pueblos conscientes y defensores de su futuro y su entorno, es
decir aquellos valientes que se atreven a sonar con un futuro distinto al que
les ofrecen los gobiernos entreguistas y facilitadores de la devastación
ambiental y la acumulación capitalista.
Entonces se tiene que los
Derechos Humanos siguen siendo aquellas banderas que dignifican los pueblos,
pero que además de ello se construyen día a día al calor de las múltiples
expresiones que exigen no se violenten sus derechos.
BIBLIOGRAFIA
1.
La
minería y las contradicciones del Frente Sandinista, tomado de http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua
2. Contexto
político en Nicaragua tomado de http://iepala.es/cooperacion-al-desarrollo/donde-estamos/america-central-y-caribe/subregiones/convenio-regional-en-america/contexto/nicaragua/contexto-politico-322/
3. http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua.
4. Contexto
Social en Nicaragua, tomado de http://iepala.es/cooperacion-al-desarrollo/donde-estamos/america-central-y-caribe/subregiones/convenio-regional-en-america/contexto/nicaragua/contexto-social-324/
5. Centro
Humboldt, Estado actual del sector minero y sus impactos socia-ambientales en
Nicaragua 2012-2013, tomado de https://www.humboldt.org.ni/.
6. Mitos
y realidades de la minería en Nicaragua, tomado de http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13646-industria-minera-mitos-paradojas-y-realidades
7. http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua.
8. http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/12608-marcharon-contra-la-mineria-en-matagalpa.
[1] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua
[2] http://iepala.es/cooperacion-al-desarrollo/donde-estamos/america-central-y-caribe/subregiones/convenio-regional-en-america/contexto/nicaragua/contexto-politico-322/
[3]
Ibídem.
[4]
Ibíd.
[5] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua.
[6] http://iepala.es/cooperacion-al-desarrollo/donde-estamos/america-central-y-caribe/subregiones/convenio-regional-en-america/contexto/nicaragua/contexto-social-324/
[7]
Centro Humboldt, Estado actual del sector minero y sus impactos
socia-ambientales en Nicaragua 2012-2013, tomado de https://www.humboldt.org.ni/.
[8]
Cuadro tomado de Centro Humboldt, Estado actual del sector minero y sus
impactos socia-ambientales en Nicaragua 2012-2013, Pág. 13. tomado de https://www.humboldt.org.ni/.
[9]
Cuadro tomado de Centro Humboldt, Estado actual del sector minero y sus
impactos socia-ambientales en Nicaragua 2012-2013, Pág 19. tomado de https://www.humboldt.org.ni/.
[10] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua
[11]
Ibíd.
[12]
Ibíd.
[13] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13646-industria-minera-mitos-paradojas-y-realidades
[14]
Ibídem.
[15]
Ibíd.
[16]
Ibíd.
[17]
Ibíd.
[18]
Ibíd.
[19]
Ibíd.
[20] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13735-la-mineria-y-las-contradicciones-del-frente-sandinista-en-nicaragua.
[21] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/12608-marcharon-contra-la-mineria-en-matagalpa.
[22]
Ibídem.
[23]
Ibíd.
[24]
Ibíd.
[25] http://www.noalamina.org/latinoamerica/nicaragua/item/13225-rancho-grande-manifiesta-su-rechazo-a-la-explotacion-minera
No hay comentarios:
Publicar un comentario